Si bien la relación de la lírica con el entorno natural celebra siglos y siglos de existencia, la poesía que piensa específicamente la animalidad -el ser animal- no es abundante. Con todo, el abismo insalvable que se suponía entre hombre y animal es cuestionado hace tiempo y desde muchos ángulos.
Rainer Maria Rilke, Gertrud Kolmar y Paul Zech, tres de las voces poéticas más importantes del siglo XX alemán, coinciden en la empatía y la solidaridad con el sufrimiento animal. Y en la insistencia en una acusación: la de la crueldad humana, pero no limitándose a señalarla, sino denunciando su trasfondo, esto es, la denegación de pertenencia, por parte del hombre, a la gran totalidad.
A los cuarenta y seis poemas en versión bilingüe y formato especular se agrega un estudio preliminar de Héctor A. Piccoli, a cargo también de la selección y traducción.