Qué buen libro, Árbol solo! me hizo pensar en la vida de los juglares, la idea del amor, en Gayo Valerio Cátulo, en la amistad, en las estructuras posibles en poesía, en el odio, por ejemplo también en torbellinos, la idea de una fuerza interior que se abre y expande y llega a su objetivo preciso sacudiendo a todos.
Tomás Boasso
Como cartas de navegación, los poemas de Vignoli señalan profundidades, zonas de peligro, aspectos de la naturaleza y otros finísimos detalles en las nunca mansas aguas del deseo. Desde luego ella conoce la forma de atravesarlas. Lo mejor es que parezca un accidente.
Ana Wandzik